En Riachuelo, recibirán el día de san Cayetano con un festival y una cantata

En la continuidad de la novena por san Cayetano, la comunidad católica de Riachuelo realizará hoy un festival y una cantata en honor al patrono del pan y del trabajo. El festejo se extenderá hasta las 24, momento en que se recibirá el día del santo, el 7 de agosto.

Riachuelo se prepara para vivir una jornada de profunda devoción y festividad en honor de san Cayetano, el venerado patrono del pan y del trabajo. Con una agenda cargada de actividades religiosas y culturales, la celebración preliminar culminará hoy con una misa, un festival y una cantata en el santuario local, el epicentro de una devoción que congregó a miles de fieles durante la reciente Peregrinación de los Trabajadores.

La jornada central de este miércoles, que marca el punto álgido de la novena en honor del santo, iniciará con la misa que se llevará a cabo a las 18, un momento de recogimiento y oración en el que los fieles se congregarán para agradecer por las bendiciones recibidas y renovar sus peticiones de pan y trabajo.

El santuario, que ha sido el punto de encuentro durante la novena, se anticipa repleto no solo por la población local, sino también por peregrinos de varias localidades de la región. 

Una vez finalizada la ceremonia religiosa, el ambiente de fe se transformará en un espacio de celebración comunitaria. 

A las 20 dará inicio un festival que promete música, alegría y un profundo sentido de camaradería. 

Las familias podrán disfrutar de un espectáculo en el que artistas locales compartirán su talento en honor de san Cayetano, en un evento que se ha convertido en una tradición esperada por los habitantes de Riachuelo y sus alrededores.

La noche de festival continuará hasta las 23, momento en que el grupo del padre Antonio Rossi deleitará a la audiencia con una emotiva cantata, una ofrenda musical que pondrá el broche de oro a la jornada.

La devoción a san Cayetano en Riachuelo es tan palpable que, para permitir a todos los fieles la oportunidad de venerar al santo, las autoridades del santuario han recordado que tanto hoy como mañana la iglesia permanecerá abierta las 24 horas. Esta medida, destinada a acoger a los peregrinos y devotos en cualquier momento del día o la noche, subraya la importancia de esta figura en la fe popular de Corrientes, un estado que ve en san Cayetano no solo un santo, sino un intercesor cercano a las necesidades más básicas de la vida cotidiana. 

Fervor

La veneración por san Cayetano no se limita a las ceremonias y festivales. Es un fervor que se siente en cada gesto y que se manifestó con una fuerza extraordinaria el pasado sábado, con la realización de la 39.ª Peregrinación de los Trabajadores. 

Este evento, que unió a la rotonda de la Virgen de Itatí con el santuario en Riachuelo, contó con una participación masiva que superó las 40.000 personas.

Familias enteras, jóvenes y adultos, caminaron kilómetros bajo un operativo de seguridad y asistencia que incluyó a la Gendarmería Nacional, la Policía de Corrientes, Defensa Civil, bomberos voluntarios, y personal de Salud Pública, entre otros organismos. La peregrinación, más que un simple recorrido, fue un testimonio vivo de la fe y la esperanza que inspira el santo patrono, una muestra colectiva de gratitud por el trabajo y una plegaria por el bienestar de los hogares.

Santuario

El santuario de san Cayetano se ha erigido como un verdadero faro de fe en la región. Durante el recorrido de la novena, y especialmente en estos días de celebración, el templo se ha transformado en un hogar para los peregrinos que llegan a buscar consuelo, a pedir bendiciones y a ofrecer sus promesas. 

Las celebraciones de la misa del peregrino y la posterior misa de los trabajadores, oficiada por el presbítero Daniel Masares, fueron los momentos culminantes de la peregrinación, en los que se reafirmó el espíritu de comunidad y devoción que define a esta festividad.

El párroco del santuario, Ariel Caballero, ha sido una figura central en la organización de todos los eventos, destacando en repetidas ocasiones la colaboración entre la Iglesia y las autoridades locales y provinciales para garantizar el éxito y la seguridad de cada celebración.